I'm not strafire
Self Incert o el cáncer de los comics modernos.
Un selfIncert es un personaje creado únicamente para ser el “avatar”
del autor o autora de una obra ficticia, a través del cual podrán interactuar
con los personajes y crear supuestas dinámicas interesantes para estimular la
curiosidad del lector o lectora.
Dicha practica es considerada de lo más patético que puede
hacer un autor, sin embargo, el estigma no ha impedido que autores de “renombre”
utilicen dicha táctica, especialmente si es para intentar adoctrinar al lector
o forzar sus agendas socio políticas en una historia.
Hace unos días salió a la venta el comic más odiado y
repudiado por todos y cada uno de los fans de DC, Marvel, Image y el mundo de
los comics en general, “I’m Not Starfie” de Mariko Tamaki (canadiense) y
Yoshitani Yoshi (ciudadanía desconocida, género supuestamente femenino ya que
no pude encontrar corroboración de estos hechos).
El mayor problema con esta bazofia es sin lugar a dudas la
imagen del personaje principal, pero antes de que me digas algo como: Gordophobo,
Machista, Misógino y etcéteras, déjame que te diga una cosa sencilla de
entender, no me importa como me llames, la verdad es la verdad.
La imagen del personaje principal de una obra no solo se
reduce al “físico” del personaje, sino al recuerdo mental y emocional dejado en
ti por dicho ser inexistente.
En la basta literatura del mundo, nos encontraremos a
cientos o incluso millones de personajes que dejaran huellas emocionales
inamovibles en nuestros corazones, nuestras almas e incluso en nuestros conflictos
morales, sí incluso personajes de historietas, caricaturas y muchos otros
medios han llegado a influir en nosotros aún sin que nos demos cuenta de este
hecho.
Mandy de “I’m Not Starfie” es todo menos entrañable, es una
mocosa con una actitud grotesca, complejo de superioridad e inferioridad, una cobardía
impresionante (demostrada al no lidiar de frente con su actitud basura), un ego
tan asombrosamente fácil de dañar que es inverosímil pensar que se trata de una
persona que va en preparatoria y tan mal hablada y de un léxico tan
asombrosamente somero que la verdad da risa saber que es una estudiante.
Sus vastos complejos emocionales (de los cuales ella es culpable
al no saber enfrentar la realidad), y de los que culpa a todo mundo menos a
ella misma, y sobre todo a su madre que literalmente no tiene la culpa de tener
una hija así.
Por dentro un ser nada complejo, solo es una niña en el
cuerpo de una adolescente, no es en lo más mínimo una adulta y sus problemas se
los provoca ella misma al no poder aceptar en el montón de MIERDA que tiene por
cerebro que la equivocada es ella, que el problema es su actitud, que tiene la genética
para verse como la chica de la que se enamoró o incluso mejor, pero eso
requiere esfuerzo y no hay manera de que ella se doblegue a los estándares de
belleza que no rompe, sino que intenta esquivar como si fuesen basura podrida.
Por amor de dios, no hay literalmente ninguna razón por la cual la chica
aquella deba enamorarse de Mandy fuera de las ilusiones y “chaquetas mentales”
de la autora.
Y es aquí a donde debemos llegar para entender porque Mandy
es ¡MIERDA! La respuesta es simple, Mandy y la autora, Mariko Tamaki, son la
misma persona, una basura de ser humano una perdedora que solo tiene trabajo en
DC por ser mujer y no por ser una autora decente o con méritos, una mujer tan
enojada con su triste y patética existencia que solo hayó una manera de soltar
sus claros problemas psicológicos: forzar a todos a través del miedo a ser
llamados misóginos, machistas, trasnphobicos y gordophobos a aplaudirle uno de
los más asquerosos bodrios de la década.
Mandy y su creadora, Mariko, son un claro ejemplo de lo que
sucede cuando damos por hecho que la gente con problemas psicológicos y
emocionales son grandes artistas, permitimos que la gente así crea que ellos no
tienen problemas, que es el mundo quien esta equivocado y que todas las
sociedades que habían funcionado nada bien, pero tampoco mal deben extinguirse
junto con la gente que ya sabe sobrellevar el peso de la sociedad.
Lo que yo leí fue la clara mala relación de Mariko con su
madre, sus propios problemas Psico-emocionales y su visión egocentrista de la
vida, donde solo vale la pena estar rodeada por aquellos doblegados a su visión
enferma del mundo, a su realidad distorsionada, al patético hecho de que ella
no es atractiva en ningún significado de la palabra y culpa a la sociedad y a
otras mujeres por tener un físico y una actitud que naturalmente atraen y atraerán
a no solamente hombres, sino, también a mujeres. Mariko se insertó a sí misma
en su comic solo para amargarle la vida a los lectores, para hacer enojar al
patriarcado, y para intentar mejorar al mundo según su visión amargada y muy
dañada de la feminidad.
Mariko Tamaki es la autora más patética que he tenido la
desgracia de leer, es obvio que cuando escribió para batman le tenían la correa
muy bien ajustada, para evitar que trastornase a uno de los personajes ficticios
más reconocibles del planeta en un ser asqueroso como lo es ella misma con tal de
cumplir con una agenda política que solo ha dañado a las luchas sociales que supuestamente
intenta representar.
Voy a listar los problemas que una adolescente normal tiene
en su vida diaria y al final contaré cuales representan correctamente Mandy y
su creadora:
1 desordenes alimenticios. Ambas tienen un claro problema,
Mandy es un personaje que se refugia emocionalmente tras la comida, cada panel
donde claramente ella tiene estrés se le ve comiendo, no dudo por el más mínimo
instante que el físico de Mariko sea como es debido a lo mismo.
2 falta de aceptación social. Mandy claramente no encaja, ni
siquiera con el submundo gótico, la estupidez de que Raven se volverá su
tutora, solo esta allí para cumplir las fantasías lesboeróticas de la autora.
3 egocentrismo. Todo adolescente pasa por una etapa en la
cual nos creemos el centro del universo y la presión de esa etapa puede llegar
a generar una gran cantidad de estrés, ansiedad y miedo que terminaran
afectando nuestro comportamiento a la larga. Claramente Mariko, no sabe o nunca
supo como lidiar con esos tres problemas causados por su etapa egocentrista y
aún hoy día cree que ella hizo todo bien.
4 auto victimización. Starfire no es la mejor madre del
mundo, pero canceló salvar al mundo con tal de centrarse en los problemas de su
hija sin dudarlo ni un solo segundo. No existe un solo punto en el cual puedas
darle la razón a Mandy por tratar como trata a su propia madre, sin embargo la “autora”
cree que Mandy tiene la razón al estar enojada por lo que sea que está enojada.
5 sexualidad. Todo adolescente sin importar su sexo biológico
pasa por una etapa de autoexploración de su identidad sexual, Mandy es Lesbiana
únicamente porque Mariko se siente atraída a las mujeres y para apelar al demográfico
LGBTTQ+.
6 autoestima. Como ya había dejado en claro Mandy es egocéntrica,
sin embargo claramente carece de autoestima en un irónico giro de los acontecimientos,
ya que es muy claro que ella se siente inferior a su madre debido a su físico,
el cual dicho sea de paso es culpa de Mandy y de nadie más, esto gracias a su
pobre dieta y clara falta de actividad física.
7 su pobre léxico. Como ya saben las generaciones van
cambiando poco a poco la manera en cómo se comunican y los significados de sus
palabras, sin embargo, esto no disculpa en lo mínimo el hecho de que toda la
historia parece haber sido escrita por un legitimo adolescente de 15 años y no
una mujer adulta a sus 46 años de edad.
8 falta de atención paternal. Starfire es una mujer ocupada,
y el padre ni sus luces, es obvio que Mandy no tiene el afecto paternal o
maternal suficiente, lo cual repito ni siquiera es culpa de Starfire. No me
sorprendería saber que el padre de Mariko Tamaki tampoco fue muy importante en
su vida.
Entonces son 8 problemas realistas, de los cuales Tamaki
falla miserablemente en abordar 8, así es señoras y señores, 0 de 8.
Voy a finalizar este artículo, con las calificaciones que le
doy al medio del comic, estos son argumento, caracterización del personaje o
personajes, arte (diseño y paleta de colores), y gusto personal, este ultimo no
importa realmente ya que es muy subjetivo.
Argumento:
0 de 5 estrellas. Solo intenta imponerte la ideología
de una adolescente idiota y los traumas de la autora con la sociedad de manera
por demás vomitiva, forzada y patética.
Caracterización de los personajes:
Mandy 0 de 5. si el objetivo era hacerla una “perra odiosa”,
y una Mary sue clásica felicidades, lo lograron. Si por otro lado querían
hacerla querida y entrañable… pues mejor no le vuelvan a permitir a Mariko
insertarse en la historia de nuevo.
Starfire 4 de 5. Aunque la intentaron hacer ver como una
persona irresponsable y una madre con fallos irónicamente es el personaje más
entrañable de toda la historia.
BlackFire 4 de 5. Es la villana, solo eso, irónicamente funciona
muy bien como villana, casi parece que el hecho de que ella y Starfire ya
tuviesen años de historias detrás y que no intentasen cambiarlas mucho las hace
funcionar muy bien ¿Quién se lo hubiese imaginado?
Claire 0 de 5. Un adorno, el objeto del amor de Mandy…
solamente eso y nada más.
Otros 1 de 5. No son relevantes para la historia, solo están allí existiendo, siendo relleno.
Diseño y dirección artística:
4 de 5. No bromeo, el arte es consistente y coherente, en
definitiva lo mejor de este bodrio, aun el diseño de Mandy es reconocible con
poco esfuerzo, a pesar de que eso en realidad no es bueno.
Gusto personal 1 de 5. Una pérdida de mi tiempo con arte
pasable.
Calificación Global: 2.2 de 5 no gasten su dinero en esto.
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